Historia de los números mayas
Uno de los elementos principales que caracterizan a la civilización maya es la escritura mediante glifos. Este sistema de escritura fue uno de los más avanzados entre las civilizaciones precolombinas. Por este motivo es interesante conocer los orígenes de esta civilización.
Orígenes de la civilización maya
La civilización Maya floreció en Mesoamérica, en lo que ahora son México, Guatemala, Belice, Honduras y El Salvador, desde alrededor del 2000 a.C. hasta el 1500 d.C. Esta antigua cultura es conocida por sus logros en arquitectura, astronomía, matemáticas y arte.
Los mayas construyeron ciudades impresionantes con estructuras elaboradas. Sus templos y pirámides, como el famoso Templo de Kukulcán en Chichén Itzá, son testamentos de su avanzado conocimiento arquitectónico y astronómico.
La escritura maya, una de las pocas formas de escritura completamente desarrolladas en el Nuevo Mundo precolombino, empleaba jeroglíficos complejos para registrar su historia, mitología y actividades diarias. Además, los mayas desarrollaron un sistema matemático vigesimal y crearon un calendario preciso que combinaba ciclos solares y lunares.
Aunque la civilización maya experimentó periodos de esplendor, también sufrió declives misteriosos, con la desaparición de ciudades importantes alrededor del 900 d.C. Las causas exactas de este declive siguen siendo objeto de debate, pero la civilización maya dejó un legado duradero en la historia de Mesoamérica.
Sistema de escritura maya
En la actualidad, el estudio de sus glifos y de su sistema de representación numérica ha sido posible gracias a los tres códices mayas que han sobrevivido hasta nuestros días. El resto fueron quemados durante el proceso de conquista y colonización española. Estos tres códices son el códice de Dresde, el códice de París y el códice de Madrid, conocido también como Trocortesiano.
Aparte de estos tres códices, el estudio de la civilización maya también ha sido posible gracias al registro que llevó a cabo el obispo Diego de Landa y que documentó en su libro manuscrito titulado “Relación de las cosas de Yucatán” publicado en 1566. Este manuscrito contiene una sección dedicada al alfabeto maya y que fue de gran ayuda para el desciframiento de la escritura maya. En el manuscrito también se hace referencia a los números mayas.
Sin embargo, la gran parte de los conocimientos que tenemos a día de hoy sobre los números mayas se deben al trabajo del bibliotecario Ernst Wilhelm Förstemann, quien entre 1880 y 1900 logró descifrar la sección sobre el calendario maya en el códice de Dresde así como los números mayas utilizados en él.
En la siguiente imagen se puede apreciar una página del códice de Dresde que incluye la representación de algunos números:
Origen de los números mayas
Los códices e inscripciones mayas muestran que los mayas disponían de dos sistemas para representar números. El más habitual era el sistema de puntos y rayas basado en un sistema vigesimal (de base veinte).
En este sistema el símbolo de un punto representa una unidad y el símbolo de una raya representa un grupo de cinco unidades, tal y como se explica en el artículo de introducción a los números mayas. Este tipo de escritura también disponía de un símbolo especial, normalmente en forma de concha o caracol, para el número cero. Mediante combinaciones de puntos y rayas era posible escribir cualquier número entre 1 y 19.
Los mayas también utilizaban un sistema de escritura llamado cefalomorfa, en la que cada número se representaba con la imagen de una cabeza, generalmente asociada con uno de los dioses mayas.
El sistema basado en puntos y rayas es más versátil y el más utilizado para representar números relacionados con fechas. Aunque no está claro el origen exacto de este sistema de representación, se conoce que la civilización olmeca había desarrollado también un sistema de numeración con características similares al maya.
Es posible que el sistema de numeración maya se desarrollara a partir del sistema olmeca, junto con una serie de mejoras que resultaron en un sistema más completo y eficaz. En base a los registros que han sobrevivido hasta el día de hoy, no hay duda que la civilización maya fue la que más extensamente empleó este sistema basado en puntos y rayas para el registro de números.
Los números y el idioma maya
El desarrollo del sistema numérico maya tuvo también una influencia en el propio idioma maya y sus dialectos. Muchos de estos idiomas tienen palabras que reflejan la estructura vigesimal del sistema numérico.
Concretamente, los mayas utilizaban la palabra hun para el número uno y kal para el número 20, o veintena. Debido a la base vigesimal del sistema maya, todas las potencias de veinte tenían una relevancia especial.
Así, los mayas utilizaban la palabra bak para referirse a 400 y pik para referirse a 8000. Esta serie de palabras (hun, kal, bak, pik) podían combinarse para referirse al resto de números. Por ejemplo, en la actualidad nos referimos al número 4000 como cuatro mil, es decir, cuatro veces mil. Los mayas basaban sus números en el sistema vigesimal y, por lo tanto, entendían el número 4000 como 10 veces 400, es decir lahun bak. La misma lógica puede utilizarse para referirse a otros números, siempre partiendo de un sistema de base igual a 20.